El Gobierno de Aragón prepara ya el anteproyecto para la supresión de los aforamientos

La consejera de Presidencia, Mayte Pérez, ha informado que la medida, que exige modificar el Estatuto de Autonomía, se planteará de forma conjunta con la reforma electoral

Zaragoza, 14 de septiembre de 2020.- La consejera de Presidencia y Relaciones Institucionales, Mayte Pérez, ha informado esta mañana que el Gobierno trabaja ya en el anteproyecto que dará lugar a la supresión de los aforamientos, una iniciativa que exige la reforma del Estatuto de Aragón. Así lo ha afirmado en una comparecencia en la Comisión Institucional y de Desarrollo Estatutario de las Cortes.

La mencionada modificación del Estatuto de Autonomía incluirá también la reforma electoral para no tener que impulsar de nuevo los complejos trámites que requiere cambiar la legislación. Pérez ha manifestado que las direcciones generales del Gobierno de Aragón implicadas “están ya preparando el texto para llevar al Consejo de Gobierno las dos cuestiones”.

En concreto, el 6 de agosto se firmó la Orden por la que se encomendaba a las direcciones generales de Desarrollo Estatutario y de Relaciones Institucionales la elaboración del Anteproyecto de Ley de Modificación de la Ley Orgánica 5/2007, de 30 de abril, de reforma del Estatuto de Autonomía de Aragón.

El objetivo es que la reforma esté lista para el próximo periodo de sesiones.

La consejera de Presidencia se ha congratulado del acuerdo que hay entre los grupos ante la necesidad de eliminar los aforamientos, algo que se constata en la «plena unanimidad» que han mostrado los partidos en el debate de las dos proposiciones no de ley que han ido en esta línea en los últimos años.

Asimismo, ha recordado que esta será la primera reforma del Estatuto de Autonomía de Aragón que impulsa el Gobierno, ya que en las tres anteriores (1994, 1996 y 2007) la iniciativa correspondió a las Cortes.

Sobre la necesidad de esta medida, Mayte Pérez ha recordado que la reforma forma parte del acuerdo de investidura y ha apuntado que es necesaria para “combatir la desafección” de la ciudadanía hacia la clase política.

Hay que luchar, ha valorado la consejera de Presidencia, contra “la sensación de que instituciones y administraciones no atienden debidamente a los ciudadanos”. Algo que puede “permitir que se generen nichos de oportunidad a movimientos sin ideas ni concepción de comunidad o de país”, plataformas que “convierten su modus operandi en la búsqueda de la satisfacción de los intereses de unos pocos en perjuicio de la representatividad, el liderazgo y la mejora de la sociedad en su conjunto”.