Zaragoza, 10 de enero de 2016.- El Consejo Asesor de Salud Mental se ha reunido hoy para abordar el contenido del borrador del Plan de Salud Mental 2017-2021, de modo que los integrantes de este órgano consultivo puedan realizar las aportaciones que consideren necesarias.
De este modo, el documento recoge, como novedades, la atención e intervención con las familias, la mejora de los sistemas de información, la autonomía y los derechos del paciente o la participación de los agentes e instituciones. En este último punto, la metodología propuesta para su elaboración incluye la máxima participación posible desde los usuarios y familiares, asociaciones, entidades concertadas, profesionales, servicios sociales, y desde otros ámbitos relacionados con la salud mental.
El borrador del plan que se ha debatido hoy en el consejo tiene como objetivo las siguientes líneas estratégicas:
Actuar sobre los determinantes, autocuidado y hábitos saludables mediante acciones de promoción y prevención de la salud mental.
Garantizar la autonomía y desarrollo de las personas con trastornos de salud mental mediante una atención de calidad, integral y comunitaria.
Facilitar mediante la participación, la información y la colaboración con entidades y asociaciones, la autonomía y los derechos del paciente.
Facilitar la toma de decisiones clínicas y de gestión disponiendo de un sistema de información fiable y útil.
Facilitar un entorno que favorezca el desarrollo, autonomía y responsabilidad de los profesionales.
Para el desarrollo y consecución de las estrategias y objetivos se plantean la realización de diferentes proyectos, entre ellos la creación de una red de rehabilitación, el trabajo colaborativo con Atención Primaria, la atención a adicciones -uno de cada cuatro adultos que padecen un problema de salud mental grave también tienen un problema de abuso de sustancias- y el refuerzo de la atención infanto-juvenil. Es en estos proyectos, que recogerán acciones concretas, evaluables y cuantificadas económicamente, donde se pretende recabar la mayor participación. El objetivo es que se materialicen entre los años 2017 y 2018.
Según la Encuesta Nacional de Salud, el 13,65% de la población aragonesa adulta se considera en riesgo de mala salud mental. En Aragón, en Atención Primaria, si se analizan los diagnósticos realizados, se atiende a unos 68.000 pacientes al año por trastornos de salud mental, siendo los diagnósticos más frecuentes ansiedad y depresión. En esta misma línea, el número de pacientes que en el año 2015 requirieron incapacidad temporal por trastornos de salud mental fue de 6.351, siendo los diagnósticos más frecuentes reacción al estrés y depresión.