El presidente de Aragón, Marcelino Iglesias, ha señalado hoy que para favorecer la continuidad de las empresas familiares y acabar con la desigualdad en esta materia con las comunidades autónomas limítrofes «hemos avanzado hacia la desaparición del impuesto de sucesión empresarial, proceso que concluirá en 2011, cuando el valor del negocio no sometido a gravamen alcanzará el 99 por ciento».
Iglesias ha recordado que, de este modo, el Gobierno aragonés cumple con una de las grandes reivindicaciones de las empresas familiares y con uno de sus compromisos en el discurso de investidura, el de la progresiva mejora de la fiscalidad, tanto en las sucesiones como en las donaciones.
El presidente de Aragón ha hecho estas declaraciones en la inauguración del XII Congreso Nacional de la Empresa Familiar, que acoge durante hoy y mañana el Palacio de Congresos de la Expo de Zaragoza y en el que ha estado acompañado por el consejero de Economía, Hacienda y Empleo, Alberto Larraz.