«Es el momento de trabajar todos juntos para garantizar el máximo nivel de empleo en la factoría de Figueruelas», ha señalado el presidente en su intervención durante el Debate sobre el Estado de la Comunidad.
Ha recordado que las Cortes de Aragón aprobaron en diciembre de 2008 la concesión de un aval a Opel, por importe de hasta 200 millones de euros, en la que fue «la primera decisión adoptada por un Gobierno en todo el mundo para afrontar la crisis en el sector de la automoción».
Sobre la recomendación de General Motors para vender la mayoría del accionariado al grupo Magna, Iglesias ha dicho que «no es la propuesta que este Gobierno contemplaba como la más favorable. Pero estamos al inicio de una larga negociación, que todavía se prolongará varios meses».
Ha reiterado que las elecciones generales en Alemania tienen hoy una influencia sobre los anuncios que vienen realizándose y ha recordado que antes de firmar con Magna es necesario un acuerdo con «el Departamento del Tesoro estadounidense, propietario de la mayoría de acciones de GM; los gobiernos alemán, español, belga, inglés y polaco, y numerosas regiones y lander de los países afectados» que también se requiere el acuerdo con «los trabajadores, la matriz de GM y la Unión Europea, que debe aprobar el plan de ayudas de los Estados».
«Hemos demostrado experiencia y capacidad en la negociación. Y les reitero que en el actual proceso son necesarias la prudencia, la confianza y la tenacidad», ha proseguido Iglesias, quién ha añadido que toda la negociación se realizará «de la mano de los trabajadores».
Ha recordado «el pesimismo que se adueñó de esta Comunidad cuando negociábamos la fabricación del Meriva y oí las mismas acusaciones contra los Gobiernos de España y Aragón, que estos días escucho», por lo que ha pedido responsabilidad. «Estamos en el momento del trabajo callado, de la negociación inteligente, y si lo hacemos toda la sociedad unida tendremos muchas más garantías de éxito».
En referencia a los grupos de la oposición ha indicado que «debilitar al negociador no suele ser la mejor estrategia para alcanzar el éxito. Especialmente cuando estamos al inicio de una negociación que será larga. Una negociación en la que todavía ningún país conoce los condicionantes que General Motors ha puesto a la oferta de Magna».
Iglesias ha concluido indicando que «vamos a seguir la estrategia que iniciamos hace meses. Y lo vamos a hacer confiados en el éxito, como sucedió en la batalla del Meriva».