Zaragoza, 24/09/08.- Así lo ha dicho Iglesias en la primera sesión del Debate sobre el Estado de la Comunidad en las Cortes de Aragón, ante las que ha pronunciado un discurso que ha girado, en gran medida, en torno a las medidas que su Ejecutivo ha adoptado y va a adoptar para amortiguar los efectos negativos que la crisis pueda tener para los aragoneses y contribuir a asentar la economía regional sobre unas bases sólidas de cara a una futura expansión.El presidente del Gobierno aragonés, Marcelino Iglesias, ha defendido hoy que la anticipación, la diversificación de la economía, la captación de empresas de alto valor añadido o la entrada en sectores estratégicos dan «ventaja» a Aragón a la hora de afrontar los primeros meses de la crisis económica.
Pero las políticas sociales, ha insistido, no se resentirán «lo más mínimo» como consecuencia de la crisis económica y ha adelantado que el presupuesto del Departamento de Servicios Sociales y Familia se incrementará un 41 por ciento en 2009 con respecto a 2008.
El Gobierno de Aragón está poniendo en marcha «todos los resortes de los que dispone» para estimular la economía, desde las medidas presupuestarias y de inversión pública a las recogidas en el Acuerdo Económico y Social para el Progreso de Aragón, en coordinación con los agentes sociales y apoyado por las entidades financieras, y las medidas estructurales de la Iniciativa Estratégica de Crecimiento.
Para hacer frente a la crisis económica, Iglesias ha hablado de la necesidad de acometer un cambio en el modelo de crecimiento, que debe basarse en la internacionalización y en la Economía del Crecimiento, es decir, en la que genera valor añadido y capacidad de arrastre, que exige cualificación de sus trabajadores y que implica investigación e innovación.
En esta línea, el Gobierno, ha asegurado, mantendrá su compromiso inversor con la Universidad de Zaragoza.
Además de este apoyo a las empresas, el Gobierno, según su presidente, prevé programas de inversión en infraestructuras públicas (carreteras, obras hidráulicas o gestión de residuos) para paliar el efecto de la caída del sector de la construcción.
El programa RED de actuaciones en las carreteras estructurantes de la Comunidad, el inicio de las obras del tranvía en Zaragoza, la vivienda protegida, el plan de depuración o el de gestión de residuos, son algunos de los ejemplos detallados por Iglesias.
El futuro de Aragón, ha añadido el presidente, también pasa por mejorar su equilibrio y, además de contar con las comarcas, se potenciarán ejes de desarrollo nucleados en torno a una red de ciudades intermedias en las que potenciar el turismo, pero también la implantación de sectores como el audiovisual, el aeronáutico, el agroalimentario o el de las empresas medioambientales, pero sobre todo el de las tecnologías de la información y comunicación, como base para eliminar la brecha digital.
En todo caso, ha reconocido que el modelo territorial no estará completo mientras no se rompa «la barrera» del Pirineo, primero con la reapertura del Canfranc y luego con la construcción de la travesía central ferroviaria, y aunque está seguro del apoyo del Gobierno central ha reiterado su preocupación por el interés de Francia, «menos consistente».
Las políticas sociales han sido otro de los ejes de su discurso y ha anunciado la elaboración de una carta de compromisos con los ciudadanos en cuanto a sus derechos sanitarios, y un incremento del 41 por ciento del presupuesto del Departamento de Servicios Sociales y Familia, de cara a la aplicación efectiva de la Ley de la Dependencia, que hasta ahora, ha reconocido, no ha tenido «la fluidez necesaria».
Todos los logros conseguidos en los nueve años de gobiernos PSOE-PAR se han debido a la estabilidad que la coalición da a la Comunidad, en cuya consecución, ha dicho, ha tenido mucho que ver el presidente del PAR y vicepresidente del Ejecutivo, José Ángel Biel, a quien ha mostrado especialmente su agradecimiento.
Este gobierno, ha afirmado, ha cumplido ya casi el ochenta por ciento de los cien compromisos de legislatura que el propio Iglesias formuló en su tercera investidura, el verano pasado, y que incluyen el desarrollo del nuevo Estatuto de Autonomía.
El presidente, además, ha pedido un «esfuerzo» para mejorar el modelo institucional y la calidad de la democracia, y para ello ha comprometido políticas de proximidad, transversalidad y participativas.
Iglesias ha concluido su discurso, de poco más de una hora, con una referencia al esfuerzo futuro que se requiere en pos de metas «más ambiciosas», puesto que los desafíos es necesario afrontarlos «con confianza en nuestro país y en nuestra gente». EFE