Miles de personas se manifiestan por la paz y contra el terror

El presidente aragonés, Marcelino Iglesias, así como los demás dirigentes, militantes y simpatizantes socialistas se sumaron a las manifestaciones de Zaragoza y Huesca convocadas en repulsa contra el terrorismo

Zaragoza, 14 de enero de 2006.- Miles de ciudadanos han

participado en la manifestaciones convocadas bajo el lema «Por la paz y

contra el terrorismo» por las organizaciones sindicales y empresariales y la

asociación de ecuatorianos Las Galápagos, para rechazar el atentado de ETA del

30 de diciembre en el que murieron dos ecuatorianos, a la que se ha sumado el

Partido Socialista junto con las demás fuerzas políticas a excepción del PP.

En la marcha de Zaragoza, que se ha desarrollado en silencio y sin

banderas, el rector de la Universidad de Zaragoza, Felipe Pétriz, ha

leído un manifiesto según el cual «el atentado supone la ruptura de la

tregua y una marcha atrás en las esperanzadas generadas durante los años en los

que no hubo víctimas mortales, pero los aragoneses, frente a ello, tienen «la

firme voluntad de combatir el terrorismo» y rechazan, además, «cualquier

instrumentación política».

Tras la pancarta de doce metros de ancho que abría la marcha iban los

secretarios generales de UGT y CCOO, Julián Lóriz y Julián Buey,

respectivamente, los presidentes de la Confederación de Empresarios de Aragón

(CREA), Jesús Morte, y de Confederación de la Pequeña y Mediana Empresa

Aragonesa (CEPYME), Aurelio López de Hita, además de Florencio Antonio Deidán,

en representación de la asociación «Las Galápagos», las organizaciones

convocantes de la manifestación.

Junto a ellos, la representación al más alto nivel de las instituciones y

partidos, menos el PP, entre ellos el presidente aragonés, Marcelino Iglesias,

quien ha señalado que el significado de la manifestación es mostrar que los

ciudadanos están «juntos contra el terror», demostrando que Aragón no es

compatible con la violencia y con el terror.

Ante la ausencia del PP, Iglesias ha afirmado que ésta es una

manifestación de todo el mundo, y ha rechazado «sacarle punta» a la

decisión de los populares porque, añadió, no conoce a nadie que no esté contra

la violencia.

Iglesias compartió pancarta con Florencio Antonio Deidán a quien mostró la

solidaridad de los aragoneses, mientras que este mostró sus deseos de que

«renazca la paz y la calma» y expresó su agradecimiento por el respaldo de la

población.

También estaba en la cabeza de la manifestación el alcalde de Zaragoza, Juan

Alberto Belloch, quien lamentó sobre todo «las ausencias», porque «no hay

ninguna razón» para que no haya estado «todo el mundo», aunque el conjunto de

los ciudadanos, «independientemente de las siglas», está contra el terrorismo y

por la libertad y la paz.