Durante diez siglos este Palacio de la Aljafería en
el que hoy se encuentran, el edificio civil más importante de la Comunidad
autónoma, ha sido lugar de encuentro y mezcla de tradiciones y de costumbres.
Este recinto, con sus patios, sus salas, su
artesonado, sigue siendo la memoria histórica de muchas generaciones que nos
legaron su patrimonio. Estos muros siguen siendo testigos del devenir de esta
Comunidad profundamente armonizada con España.
Esta rica tradición de convivencia, de amalgama, de
crisol de culturas, nos ha permitido trabajar de forma conjunta en proyectos
ilusionantes desde el diálogo, el acuerdo y la pluralidad de ideas que conviven
en estas Cortes de Aragón, porque no en vano aquí residen los representantes del
pueblo aragonés.
Aragón ocupa un lugar geoestratégico central en el
sur de Europa. Nuestra capital, Zaragoza, ha hecho ya realidad su conversión en
un lugar de puertas abiertas por su red de comunicaciones, a través de
autopistas, autovías, tren de alta velocidad y aeropuerto. En esta ciudad se
funde una rica historia de sinergias con un importante avance modernizador de
todas sus estructuras.
Una exposición internacional es, sin duda alguna,
una ocasión única para Zaragoza, y para una Comunidad autónoma ambiciosa, como
es Aragón, para dar un salto adelante y hacer una apuesta estratégica de
futuro.
Somos plenamente conscientes de que estamos ante
una cita extraordinaria que nos va a permitir poner en práctica e intensificar
los valores como el intercambio de ideas y de proyectos, elementos todos ellos
que quedan perfectamente simbolizados en esta arquitectura tan singular como
integradora que hoy les acoge.
Por ello, no es una casualidad que este acto de
apertura del Symposium Internacional de Zaragoza 2008 se celebre en este Palacio
de la Aljafería.
Como saben aquí están representados todos los
grupos parlamentarios, todas las fuerzas políticas de Aragón. Todas ellas están
de acuerdo de forma unánime para impulsar esta propuesta desde la unidad y el
consenso.
Zaragoza 2008 con su lema «Agua y desarrollo
sostenible» es un proyecto compartido plenamente por toda la sociedad aragonesa,
que está unida en esta gran aventura que entronca perfectamente con las
características culturales, geográficas y sociológicas de nuestra
tierra.
Los responsables institucionales estamos en la
obligación de intentar hacer realidad los deseos y anhelos de la ciudadanía. En
esa provechosa empresa estamos trabajando todas las instituciones en Aragón
cogidos de la mano con el Estado porque un proyecto de esta magnitud depende del
esfuerzo conjunto para que salga adelante.
Desde la sede de las Cortes de Aragón ruego acepten
nuestra hospitalidad deseándoles una feliz estancia en Zaragoza. Muchas
gracias